En primer lugar debes observar el tiempo que tu tortuga pasa sin comer, porque en algunas especies es una practica normal y no debes alarmarte. Por el contrario, si notas que sale de su refugio y no come por mucho tiempo entonces son signos de que la tortuga esta sufriendo algún trastorno digestivo, producto de algún cambio en su dieta. Otro factor que puede desencadenar los ayunos prolongados es el cambio de temperatura ambiental que modifica sus actividades diarias, desde comer hasta tomar el sol.
Entonces, lo mas recomendable es acudir al veterinario para que realice una valoración física y recetar algún suplemento vitaminado.
Si la tortuga no se mete al agua puede ser un problema mayor. Lo mejor sera verificar que el agua y todos los elementos del acuario estén en total normalidad, esto incluye el PH del agua y la composición de las rocas o plantas acuáticas que también pueden alterar las condiciones del hábitat artificial.
La temperatura del agua también influye porque si no esta adaptada a la tortuga, esta se sentirá incomoda y no querrá entrar al agua. También puedes intentar cambiar el sustrato.
Después de realizar todos estos cambios observa a tu tortuga y si aun no quiere entrar al agua, puede que este sufriendo alguna enfermedad que le impide nadar.